DIETA EQUILIBRADA

La dieta equilibrada esta siendo cada vez mas importante, y no solamente para tener un cuerpo perfecto.

Una dieta equilibrada es aquella formada por los alimentos que aporta una cantidad adecuada de todos los nutrientes necesarios para tener una salud optima. Debe de ser variada, consumiendo productos frescos y de temporada.

El concepto de dieta equilibrada puede ser muy concreto si sabemos que alimentos y que cantidades debemos de consumir.

Características de la dieta equilibrada

  • Para que una dieta sea correcta y nutricionalmente equilibrada debe de estar presente la energía y todos los nutrientes necesarios, en las cantidades adecuadas para cubrir las necesidades nutricionales de dicha persona y evitar deficiencias.
  • Se puede conseguir fácilmente eligiendo una dieta variada, que incluya todos los grupos de alimentos (cereales, frutas, hortalizas, aceites, lácteos, carnes, pescados,…), ya que los nutrientes se encuentran en una amplia gama de alimentos.
  • La moderación de las cantidades consumidas de todos los alimentos para mantener un peso adecuado y evitar el sobrepeso.

Consejos para una dieta equilibrada

  • No tomar carne roja con grasa, embutidos o carnes en salsa más de una o dos veces por semana.
  • Preferiblemente tomar los alimentos cocidos, a la plancha o al vapor.
  • Restringir los productos lácteos al yogurt, requeson, margarinas insaturadas y leche preferiblemente desnatada.
  • Evitar tomar mas de una vez por semana: nata, mantequilla, cremas de queso y helados.
  • Consumir diariamente verdura y una o dos piezas de fruta. La verdura no se debe de cocer mucho ya que pierde vitaminas.
  • Dos o tres huevos a la semana.
  • Legumbres un día a la semana.
  • Limitar los dulces a una o dos veces al mes.
  • Evitar las bebidas alcohólicas.
  • Bebidas con gas: además de que el gas hace que aumentes de volumen también puede crear flatulencias, las bebidas refrescantes llevas azucares, lo cual tomar una vez en semana es saludable, pero no más.

RECOMENDACIONES GENERALES PARA UN ESTILO DE VIDA SALUDABLE

  • Ingesta diaria abundante de frutas, verduras y cereales, pan y patatas, fuente principal de hidratos de carbono complejos.
  • Elección preferente de la fruta fresca, como postre en las principales comidas del día y en otras comidas secundarias. Como por ejemplo en el desayuno, en la merienda…
  • Tomar legumbres al menos 2 veces en semana, por su elevado aporte proteico de origen vegetal y por su contenido en fibra, minerales, etc.
  • Moderar el consumo de carnes de vacuno y cerdo, dando preferencia al consumo de carnes magras, como la de ave.
  • Consumir preferentemente los alimentos frescos de temporada.
  • Tomar diariamente leche, yogures y quesos, preferiblemente bajos en grasas, para asegurar el aporte necesario de calcio y otros micronutrientes.
  • Utilizar el aceite de oliva como principal fuente de grasa alimentaria, tanto para cocinar como para alizar (siempre con moderación).
  • Ingerir pescado 3 ó 4 veces a la semana, intercalando pescado blanco y azul para que exista un equilibrio de los nutrientes de ambos.
  • Usar el ajo, la cebolla, el vinagre, el limón o las hierbas aromáticas para condimentar como alternativa a la sal, reduciendo el consumo de esta, lo que favorece la regulación de la presión arterial.
  • Beber al menos 2 litros de agua al día.
  • Moderar el consumo de dulces, pastelería y bollería (sobre todo la de origen industrial).
  • Evitar el consumo de bebidas alcohólicas, haciendo una concesión al vino tinto durante las principales comidas de forma moderada, y siempre teniendo en cuenta que está absolutamente contraindicado de toda bebida alcohólica, incluyendo el vino, tanto en los niños como en las embarazadas.
  • Evitar el consumo de tabaco.
  • Pasear y hacer ejercicio al aire libre de forma regular y continua en el tiempo.
  • Dormir diariamente 7 u 8 horas.

LA IMPORTANCIA DE LAS 5 COMIDAS AL DIA

Es importante realizar una comida cada 3 o 4 horas durante el día para mantener un nivel de energía más o menos constante.

Las primeras comidas del día: el desayuno, la media mañana y la comida, deben ser un poco más fuertes que la merienda y la cena, ya que durante la tarde por lo general solemos estar menos activos. Además, si comes 5 veces al día controlarás mejor tu apetito ya que evitarás picoteo o atracones y será más fácil llevar a cabo una alimentación equilibrada.

Por otro lado, la media mañana y la merienda nos ayudan a consumir todos los grupos de alimentos en sus raciones recomendadas ya que sin estas dos tomas sería muy difícil comer todo lo que debemos. Por ejemplo, sería más complicado llegar a las raciones diarias recomendadas de lácteos y fruta.

Tu metabolismo cambia según sea tu alimentación. Por ello es importante tener unos niveles de energía constantes ya que de esta manera se consigue un metabolismo adecuado.

Tu organismo está preparado para pasar hambre y por ello tiene mecanismos de defensa. Es decir, cuando estás en situación de ayuno, tu organismo está en “alerta”. Esto significa que está preparado para acumular reservas en cuánto coma algo. Por tanto, cuando hagas la siguiente toma tras el ayuno tu cuerpo acumulará la grasa como “reserva”.

Cuando el cuerpo acumula esta grasa desciende su gasto metabólico y por lo tanto quemas menos calorías al día. Por el contrario, si los niveles de energía son constantes, tu metabolismo está funcionando y tu gasto metabólico es mayor.